Entrevista con la columnista más leída por los líderes de opinión en el Valle del Cauca: Paola Andrea Gómez Perafán. 

Construir opinión, generar una reflexión ciudadana, ir más allá del mero registro informativo, contribuir al ejercicio de la democracia y hacer un periodismo concienzudo, serio, riguroso y respetuoso, es lo que pretende con sus columnas: Paola Andrea Gómez Perafán, egresada UAO y docente del ‘Taller de Periodismo con Visión de Género’.

Paola, quien ha trabajado por más de 23 años en el periódico El País, donde actualmente es Jefa de Redacción, fue reconocida como la columnista más leída del Valle del Cauca, por el estudio ‘Panel de Opinión’ de la firma Cifras y Conceptos.

Este estudio se realiza cada año entre líderes de opinión del país, y de las distintas regiones, para analizar temas nacionales y medir cómo van los mandatarios, los congresistas,  la economía, la política, los medios de comunicación y otras preferencias a la hora de informarse o de leer.

Al respecto, Paola comentó que:

“Este reconocimiento me llena de satisfacción, además porque siempre pienso que estoy escribiendo para la gente del común, no para los líderes de opinión. No voy a clubes, no soy amiga del poder, no pertenezco a la élite. Simplemente soy una periodista con casi 24 años de carrera, que ha caminado la ciudad, la conoce, la siente y trata de interpretarla, de leerla. 

He  podido construir una carrera de la que me siento orgullosa, porque considero que lo más valioso de este oficio es el servicio, la credibilidad y la honorabilidad. Nadie me ha regalado nada. He contado con la confianza de mis jefes en El País, pero todo lo he construido a pulso, con trabajo y mucho sacrificio. Así que eso me da mucha más alegría. Finalmente, para mí lo importante, con el respeto de los líderes de opinión, es que me lea la gente de a pie, la ciudadanía del común”.

¿Sobre qué temas escribes en tus columnas de opinión?

“Sobre lo que pasa en la ciudad, en la región, sobre lo que nos preocupa y sentimos, sobre la seguridad, la gente, la vida en la ciudad, lo que anda de boca en boca (así se llama la columna, aunque casi nadie recuerda el nombre), sobre nuestras vivencias, los hijos, la familia, la sociedad, y en gran medida, también sobre los temas de género, que son mi otra gran pasión como periodista”.

¿Cuáles de las columnas de opinión que has escrito te han gustado más?

“Me gustan mucho las columnas de ciudad que ponen a hablar a la gente, y eso pasa con frecuencia con temas como la seguridad y la movilidad. Algunas que recuerdo y que dieron mucho de qué hablar fueron:

• ‘El sheriff del pueblo’, donde hablaba de un ex secretario de Tránsito: Alberto Hadad, cuyo estilo era muy controvertido, por autoritario, aunque a mucha gente le encantaba ‘la chapa del sheriff del pueblo’, como titulé la columna, se hizo popular y sé que me pegó un madrazo al preguntarle a una periodista amiga: “¿quién es esa … de Paola Gómez?”
• ‘El tumor del Peñón’ fue otra muy destacada, donde hablaba de las obras del colegio Sagrada Familia en El Peñón, del que soy egresada, y del impacto en el paisaje de la ciudad, al pasarse de la altura permitida y crear un cisma entre la administración y la firma constructora. Dio mucho de qué hablar, y hoy, mucho después esa obra sigue parada. 
• ‘Caravanas de la muerte’, que escribí hace poco y por segunda vez sobre el tema de las caravanas fúnebres tenebrosas  con disparos, robos y desórdenes que se volvieron habituales y cada vez más inmanejables en la ciudad, sin que nadie pueda hacer nada.
• ‘Alcalde, ¡no dé papaya!’: en la administración de Armitage, quien se hizo popular con su frase de: “no tome alcohol, tome jugo de papaya”, para una fiesta de la Madre. En la columna hablaba de una seguidilla de metidas de pata del Alcalde, por sus salidas un tanto folclóricas que terminaban en crisis de gobernabilidad.
• ‘¡Esto no se cura con rumba!’: criticando la frescura de muchos que andan por ahí de rumba en rumba, como si en esta ciudad, en este mundo, no estuviera pasando nada. Del Covid-19 he escrito varias, es como una campaña personal para decirle a la gente que se cuide, que sea solidaria, que valore lo realmente importante, que esto no sea en vano. A veces creo que es una lucha perdida, como tantas otras, pero ahí sigo.
• ‘Abraza la vida, siempre’. Con esta pasó algo muy bonito y es que se convirtió en una especie de oración de ciudad, cuando en el Colegio Berchmans murió un niño en un accidente y este hecho nos conmovió a todos los que tenemos hijitos, hijitas, en edad escolar. En la columna hablaba con sumo respeto por el dolor de esa familia, de la necesidad de no juzgar, de ser solidarios, de abrazar a nuestros niños, de darles amor, de educarlos, de decirles que son todo, no sabemos esto cuando termina. Fue una plegaria muy bella que se viralizó en los grupos de WhatsApp de Cali.
• De mujeres, varias: ‘La mujer a los 40 y más’, que también se volvió viral, ‘¿Viejas ellas y ellos no?’, esta fue un ‘hit’ porque cuestionaba la cómoda costumbre  de decir que ellos se ponen interesantes y las mujeres maduras, viejas, simplemente; fue divertida y sarcástica. Otras son: ‘En la era del posmachismo’, ‘Acoso sexual’, o la más reciente: ‘#treintayunamenos’, sobre el drama de los feminicidios en el Valle del Cauca”. 

¿Dónde podemos leer tus columnas?

“En el periódico El País, los jueves cada quince días. Es la cajita más ‘pequeñita’ de las páginas de opinión y fíjate, es quincenal, así que con orgullo digo que el mérito de ser ‘la más leída’, es mucho más grande frente a otros que escriben semanal y hasta diario y con mucho más espacio”. 

¿Qué consejo le darías a los estudiantes y egresados que desean desempeñarse como columnistas?

“Si son periodistas, que primero se formen, lean mucho, conozcan el oficio, conozcan los temas, que hayan caminado, reporteado, escuchado, batallado. Ahora mucha gente opina en redes sociales y eso está bien, pero lo que no lo está, es que opinen desde la vanidad o la furia, en busca del ‘like’ o de la relevancia como sea. No se puede opinar si no hay fondo, si no sabes de qué estás hablando. No se puede opinar con ofensas o calificativos vacíos.

Pero sobre todo, en un país tan complejo como este, los y las columnistas y quienes opinamos en redes tenemos una responsabilidad enorme con la audiencia. No discriminar, no irrespetar, no lastimar, no aumentar el odio, deberían ser principios innegociables. Escribimos lo que pensamos. Por eso siempre insisto en que primero, antes que periodistas o columnistas o lo que seamos en la vida, debemos ser personas. No seré la primera que lo dice. Pero es algo en lo que pienso siempre, todos los días. Está en mi manual de vida y me acompaña a donde quiera que vaya. En la era digital, la opinión es un asunto de suma responsabilidad”.

Para conocer más del trabajo de Paola, puedes seguirla en sus redes sociales:

• @pagope en Twitter.
• Paola Andrea Gómez Perafán en Facebook.
• @paolagomezperafan en Instagram.

Informes:
Facultad de Comunicación y Ciencias Sociales
Paola Andrea Gómez Perafán
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